Recientemente vimos cómo prevenir los catarros de manera natural mediante alimentos que refuerzan el sistema inmune, como el ajo y el jengibre, o preparados caseros herbales con cualidades antivirales. En el post de hoy nos centramos en remedios para los niños, propensos a constiparse pero reacios a ciertos sabores.
Remedios como una dieta sana, con mucha fruta y sin alimentos proinflamatorios, o el propóleo y la equinácea, complementos con eficacia demostrada, como veremos. Para padres que prefieren alternativas más naturales para prevenir los resfriados en sus hijos.
Resfriado en niños: ¿qué lo provoca?
El resfriado común, catarro, constipado o resfrío, es una enfermedad infecciosa que afecta al aparato respiratorio superior, esto es, la nariz, los senos paranasales, la faringe y la laringe. Lo causa principalmente —entre el 30 y el 50 % de los casos— un género de virus llamado rinovirus (Rhinovirus), los patógenos más comunes en el ser humano.
Se da en personas de todas las edades, especialmente niños, que lo contraen por contacto con las secreciones de personas infectadas o la inhalación de sus gotas de saliva. Decimos «especialmente niños» porque es sabido que a medida que la edad aumenta, la incidencia del resfriado común disminuye.
Buena parte de los episodios de catarros o constipados suceden en invierno y, en general, durante los meses fríos, cuando pasamos más tiempo en ambientes cerrados, en contacto cercano con personas contagiadas. También los más pequeños, que pasan muchas horas en guarderías o colegios, donde los virus se trasmiten con facilidad de un niño a otro.
Una vez contagiado, los primeros síntomas —rinorrea, inflamación y obstrucción nasal, estornudos, tos, dolor de garganta y malestar general; en los niños es frecuente asimismo la fiebre baja— se manifestarán trascurridos uno o dos días. La duración del episodio de resfriado será de siete a diez días, aunque puede perdurar varias semanas.
¿Cómo prevenir los resfriados en los niños?
Es muy importante cuidar su dieta, eliminando alimentos inflamatorios: alimentos procesados o ultraprocesados, azúcares simples, harinas refinadas, grasas trans, etc. Los multivitamínicos y fármacos inmunoestimuladores resultan en muchas ocasiones innecesarios si el niño lleva una dieta adecuada, basada en alimentos naturales. Una dieta que incluya frutas con poder antioxidante, como la manzana, o ricas en vitamina C (ácido ascórbico), como las naranjas y las mandarinas o el kiwi.
Ni mucho menos pueden estos suplementos sustituirla. Además, podrían incluso ser contraproducentes si tenemos en cuenta el riesgo de sobredosis vitamínica (hipervitaminosis), en el caso de los primeros, y otros efectos secundarios. El organismo del niño podría asimismo habituarse a «trabajar con su ayuda» y, una vez finalizado el tratamiento, resfriarse con más asiduidad y síntomas más severos.
Por todo ello y porque muchos padres son reacios a dar a sus hijos suplementos nutricionales «de farmacia» o medicamentos, sobre todo en edades tempranas, en niños es si cabe aún más conveniente el uso de remedios naturales como preventivos de resfriados o constipados. Y existen complementos naturales que realmente pueden ayudar.
El propóleo es un antibiótico natural y podría ser El secreto de los niños que no se acatarran (ver) En el artículo, la pediatra Amparo Saura explicaba, en referencia al propóleo, «hemos observado que los niños que lo consumen habitualmente tienen menos complicaciones de vías respiratorias altas». ¿A qué se debe? Esta sustancia balsámica, elaborada por las abejas a partir de resinas segregadas por los brotes tiernos de los árboles, posee propiedades antivirales e inmunoestimuladoras probadas (estudio, estudio, estudio, estudio).
Otro complemento natural que ha demostrado ser eficaz en la prevención del resfriado común y demás infecciones del tracto respiratorio en niños es la equinácea (Echinacea). Particularmente, la equinácea en preparaciones herbales junto con própolis y vitamina C (metanálisis, metanálisis, estudio).
Uso del propóleo como preventivo de resfriados en los peques
Para prevenir resfriados en el niño/a o evitar sus complicaciones, recomendamos darle 1 ml de tintura de própolis al día diluidos en líquido (zumos, leche, etc.).
Si bien puede que el sabor de la tintura le resulte algo extraño y no le guste. En ese caso, puedes darle jarabe de própolis como preventivo, bastará una cucharadita 3 veces al día. Contiene própolis y miel, que combinados son aún más potentes, (ver) y plantas con propiedades protectoras como la salvia, el llantén mayor, tomillo y romero. A Laura, una de nuestras clientas, le funciona con su pequeña; así nos lo contó:
«Desde que se lo doy a mi hija de tres años como preventivo, los resfriados son eso, resfriados y no pasan a ser bronquitis. Mi marido y yo también lo tomamos y estamos encantados!».
Además…
Nuestros complementos alimenticios naturales:
- Están certificados ecológicos.
- Si el niño/a es celíaco/a o padece alergias o intolerancias alimentarias, están completamente libres de gluten. Aunque existe una pequeña proporción de la población alérgica a los productos de las abejas, asegúrate antes de que tu hijo/a no lo es.
- El propóleo es fácilmente asimilado por el organismo, no produce efectos colaterales indeseables.
- Su consumo a largo plazo no provoca la aparición de microorganismos resistentes, tal y como
ocurre con los antibióticos u otros fármacos.
Mantén a los peques de la casa libres de resfriados, mocos y noches de tos con ayuda de Propol-mel. Complementos alimenticios elaborados a base de própolis e ingredientes 100 % naturales.