Aunque estos últimos meses no se hable de otro mal que no sea el que provoca cierto virus, es otoño y pronto llegará el invierno, tiempo de pañuelos, tos y repentinos dolores de garganta. Tiempo de resfriados y de gripe.
¿Cómo ayuda este producto natural de la colmena a combatir la tos?, ¿existe evidencia que lo demuestre?, ¿qué tipo de miel es mejor para la garganta? Para mantenerte o mantener a los tuyos protegidos de los estragos del frío que se avecina, no te pierdas este artículo.
Miel de abeja: por qué es beneficiosa para las vías respiratorias
La miel se produce en todo el mundo y su uso tiene una historia muy larga; se emplea tradicionalmente, entre otras cosas, para aliviar los síntomas de la tos y las molestias de garganta. La propia Organización Mundial de la Salud la identifica como un tratamiento demulcente para la tos (referencia).
Un demulcente es una sustancia viscosa que ejerce acción protectora local, igual que las mucosidades en las membranas mucosas. Por lo que se utiliza para el tratamiento local de la tos y otros síntomas de las infecciones del tracto respiratorio superior (ITRS).
La miel de abeja es, sin duda, el demulcente más conocido y usado. A sus cualidades demulcentes y terapéuticas se unen sus valores nutritivos y vitamínicos.
Recordemos que las abejas la producen a partir del néctar de diferentes flores de las que obtiene sus propiedades. Flores de plantas silvestres como la salvia, el tomillo o el romero, con conocidas propiedades protectoras ante las adversidades del invierno.
Miel para la tos y ¡dulces sueños!
La tos en los más pequeños preocupa a los padres y es una de las principales causas de visita al ambulatorio. Esta puede afectar a la calidad de vida, causar ansiedad y perjudicar el sueño de niños y padres.
El papel de la miel de abejas ha sido reconocido en la literatura científica y existe evidencia convincente que respalda su utilidad para prevenir la tos.
Así, distintos estudios muestran la eficacia de este producto natural sobre la tos nocturna y la calidad del sueño en los niños y sus padres. Incluso ha demostrado aliviar los síntomas de la tos en mayor medida que tratamientos antitusivos y para el resfriado como la difenhidramina, o reducir su duración mejor que el salbutamol (revisión sistemática, revisión, estudio, ensayo clínico).
En este se comparó la miel con dextrometorfano con sabor a miel. Y los padres calificaron la primera como la más favorable para el alivio sintomático de la tos nocturna de su hijo y la dificultad para dormir debido a la ITRS.
El jarabe para la tos a base de miel como demulcente es muy espeso. Y esta espesura —aportada por mucílagos y pectinas vegetales— permite fluidificar y lubricar la garganta a su paso, siendo altamente beneficioso para el aparato bucal.
¿Qué miel es mejor para tos y garganta?
Hace unas semanas te describimos los tipos de miel, sus variedades y cómo elegir la más adecuada según la finalidad.
Una de las variedades más potentes en cuanto a propiedades medicinales y beneficios para la garganta es la miel de bosque (mielada), una miel excelente para su uso como protector de la garganta y las ITRS. Más detalles sobre los beneficios de la miel de bosque aquí.
No obstante, todas ellas —miel milflores, de eucalipto, de cítricos, de castaño (post), miel de flor de almendro, etcétera— ayudan a reducir los síntomas de catarros y gripe gracias a sus propiedades demulcentes, antibacterianas, antivirales o antiinflamatorias.
Pero eso sí, asegúrate de que sea miel pura, no pasteurizada ni calentada, elaborada artesanalmente. Solo así se conservan intactos todos sus nutrientes y vitaminas y, por tanto, todas sus propiedades beneficiosas.
TIP: Ya vimos las ventajas de la unión miel & própolis. Ambos están en nuestro jarabe; aunque, si lo prefieres, también puedes mezclar unas gotas de tintura de própolis (o bien tintura de própolis verde) en una cucharada de miel y tomarlo a modo de caramelo. El jarabe o la miel con própolis son mejores para la tos con mocos y el spray, para la tos seca.
En definitivita, la miel:
- Es un agente antibacteriano, antiviral y antiinflamatorio.
- Protege frente a infecciones de las vías respiratorias.
- Revitaliza y protege la garganta.
- El jarabe con miel fluidifica y lubrica la garganta.
- Previene la tos. Tomar una pequeña dosis antes de dormir alivia la tos nocturna asociada con las infecciones respiratorias y mejora la calidad del sueño de manera más eficaz que dosis equivalentes de algunos medicamentos antitusivos.
Escrito por Elisabeth Lahoz
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